Por: Ana Sastre Quemada
¡Atención a navegantes! Os traemos un post diferente, colorido y… ¡divertido! No, tranquilos… De la Holi ya hablamos en su momento. Esta vez os queremos presentar algo que, tradicionalmente proviene de Canadá y Estados Unidos, pero que cada vez se está expandiendo más por el sur de América.
Y es que, hablamos del Mardi Gras. Pero…
¿Qué es el Mardi Gras?
El Mardi Gras proviene del idioma francés, y literalmente es “Martes Graso”, aunque seguro que muchos lo conocéis como Martes de Carnaval. Y es que es un festejo, de raíces religiosas que depende exclusivamente de las fechas en las que se celebre Semana Santa.
¿Cuándo se celebra el Mardi Gras?
Como hemos dicho, depende de las fechas en las que cada año cae Semana Santa. Por lo que, el Mardi Gras se celebra el día antes del miércoles de ceniza. Este día, según la tradición cristiana, es el último día antes de que comience la cuaresma y la Semana Santa.
¿Dónde tiene su origen?
El Mardi Gras se celebra en el continente americano, sobre todo. Pero, concretamente es muy popular en Nueva Orleans, Luisiana. Aquí es donde se celebra el Mardi Gras más grande y hacen desfiles, fiestas y diferentes actividades por las calles de esta ciudad.
De hecho, nos tenemos que remontar a 1837 cuando se celebró el primer desfile en Nueva Orleans con este nombre.
¿Qué se hace en el Mardi Gras?
Si vas alguna vez a Nueva Orleans en esta fecha, te encontrarás con diferentes festividades, donde diferentes grupos llamados Krewes o cofradías, lanzan collares cuando van en sus carrozas por la ciudad. Y es que estos collares de colores tienen un significado especial: el morado hace referencia a la justicia, el verde a la fe y el dorado representa el poder.
Si ves esta festividad, lo más seguro es que te recuerde a carnavales como los de Venecia, Italia, donde usan máscaras; carnavales como en Tenerife, España, donde hay mucha extravagancia; y cofradías, que son los grupos religiosos que luego en Semana Santa se pueden ver con pasos por diferentes ciudades cristianas.
Nosotros lo tenemos clarísimo: ojalá vivirlo algún día. Aunque es cierto que se celebra en varios países, habría que ir a verlo a Nueva Orleans, ¿quién se apunta?