Artículo y Fotos por: Charlotte
Mis gatitos se llaman Mieko y Leona. Son de color gris y blanco, y su tipo de raza es pelo medio corto. Los obtuvimos de la abuela de mi amiga Eleanor. Mieko y Leona eran gatos callejeros que la abuela de mi amiga atrapo. Después de llegar a la casa de la abuela de mi amiga, fuímos a una pequeña habitación donde estaban los gatitos y sus dos cajas de arena. Escogí a Mieko porque saltó hacia mí y se acurrucó conmigo, lo único que realmente no me gustó fue cuando me mordió. Después de que escogí a Mieko, mi hermana Cara eligió otro gato que se parecía mucho al gato que yo había elegido. Luego hicimos la hipótesis de que el gato callejero original tenía un bebé que se hizo mayor y tuvo los dos gatos que escogimos…
Sus caras lindas parecían bolas de pom-pom, y sus grandes ojos eran tan lindos que parecía que estaban tratando de hipnotizarte con su ternura. Entonces, eran muy pequeños, solo de un cuarto y algunos centímetros de largo. Cuando los trajimos a sus residencias caninas, a nuestra casa, les dimos sus nombres, Mieko y Leona. Un dato chistoso es que estaba un poco asustada de los gatitos las primeras cinco o seis semanas que los recibimos, tenía un poco de miedo de ellos.
Hoy en día los amo muchísimo. Algunas cosas que hago con mis gatitos en casa: Jugar con ellos con su juguete favorito, una pala larga con una cuerda negra que sale de un lado. La cuerda negra tiene una cosa plástica roja que contiene seis plumas coloradas. Se ponen locos por este juguete. Otra cosa que hago es alimentarlos. Mis gatitos comen algo que tiene forma de un chicken nugget, pero es una mezcla de carne cruda. Yo pienso que su comida es terrible, pero mis dos gatitos lo comen como locos. Solo toma diez a veintidós segundos para comer cada miga. Yo haga una cosa más con ellos, y eso es acariciarlos. Cuando lo hago, empiezan a maullar muchísimo. Algunas veces cuando el gato está maullando muy, muy ruidoso, mi papa dice: “Pienso que se ha convertido en una cadena”. Eso me hace reir.
Mis gatitos son muy felices y la cosa que más me gusta hacer con ellos es hacerles cariño. Especialmente en la noche, después de su tiempo de jugar, cuando duermen conmigo cerca de mis pies. Lo chistoso pero molesto que hace Leona en ese tiempo es robar mi almohada.
La autora se llama Charlotte, vive en Minnesota. Ella tiene 10 años. Le gusta leer muchisimo y tiene muchas amigas. Ella tiene tres hermanas menores, y por supuesto, dos gatitos.
