Día de la marmota
Por: Ana Sastre Quemada
Cada 2 de febrero se celebra el Día de la Marmota, que es conocido sobre todo en Estados Unidos y en Canadá por los granjeros.
¿En qué consiste el Día de la Marmota?
Este día es celebrado por los granjeros de algunos países, cada vez en más, y los hace pronosticar si el invierno va a dudar mucho más o no. Y en base a eso, conocen cuánto les queda para sus cosechas.
Es todo gracias a un animal que hiberna, que como recordaréis de la bookazine de los osos son aquellos animales que durante el invierno entran en un estado de descanso para poder sobrevivir al frío.
¿Qué papel tiene la marmota en este día?
La marmota es la protagonista de este día. Si la marmota sale y ve su sombra, entonces el invierno durará seis semanas más. Si al salir de su madriguera no ve su sombra, suele coincidir con que la primavera comenzará pronto.
Dicho esto, la marmota al ver su sombra volverá a meterse dentro de la madriguera y si no la ve, habrá terminado su hibernación y saldrá de ella.
¿Existe una marmota oficial para esto?
Podríamos decirte que no, pero realmente la más conocida es la Marmota Phil de Punxsutawney, Pensilvania. Por lo que, cada 2 de febrero todos los focos están puestos en la Marmota Phil, que será la que nos diga cuánto tiempo nos queda para que termine el invierno.
¿Desde cuándo se celebra el día de la marmota?
Te vas a sorprender, porque nosotras nos hemos sorprendido mucho… Resulta que este día se lleva celebrando desde el año 1887.
¿Te imaginas levantarte un día y que ese día se repita, una, y otra, y otra, y otra vez? Pues queremos contarte que puede suceder. Bueno, realmente no, ¿o sí? Como estamos hablando de la marmota y de su día… Queríamos recomendarte una película que se llama “El día de la Marmota”, protagonizada por Phil Murray y que además de explicar en qué consiste este día, te vas a reír muchísimo porque es una película maravillosa.
Estamos deseando saber qué dirá este año la marmota Phil. No es que no nos guste el invierno, pero un poquito más de calor por aquí… no nos vendría mal.
